Autora: Andrea García Cubilla
Edición: Patricia Gascón-Vera
Cada vez hay más tipos de alimentación en el mundo. Muchas veces se debe a alergias o intolerancias, pero, muchas otras, se debe a cuestiones de ideología. Uno de los ejemplos más extendidos es el de aquellos que deciden eliminar su consumo de carne y/o derivados: veganos y vegetarianos. Un caso exponencial es A Flama es un restaurante regentado por mujeres que han hecho del veganismo su bandera y seña de identidad.
Ubicado en Zaragoza hacen pedidos a domicilios desde un menú muy amplio y con el que esperan responder a una comunidad envolvente con propuestas para el colectivo LGTB y con su menú en aragonés, entre otras acciones de marketing.
Un hogar zaragozano para la cocina vegana
El estilo de vida veggie está en auge hasta el punto de que muchas personas, aún sin eliminarlo, han reducido drásticamente su consumo. Los motivos que llevan a esta decisión suelen ser parecidos. Por un lado, la OMS cada vez advierte de más peligros que conlleva un consumo excesivo de carne, especialmente la carne roja. Por otro lado, una concienciación colectiva sobre el sufrimiento animal y el maltrato que muchos padecen en las granjas. Tampoco hay que olvidar los motivos ecológicos, las granjas están entre los mayores emisores de CO2 del mundo.
Todas las estadísticas apuntan a que los seguidores de estas dietas van a seguir en aumento, por lo que la hostelería ya mira hacia este nuevo mercado. Los restaurantes ofrecen cada vez más productos veganos, a veces incluso una carta entera, y los hay que se han especializado exclusivamente en este sector. Este es el caso de Taberna A Flama, ubicado en la Calle Mayor de Zaragoza.
Acciones de marketing para atraer al público
A Flama en su menú ofrece todo tipo de platos, caracterizados por la ausencia de carne y derivados, y es que buscan dar una alternativa a cada clase de comida. Sus dueñas buscan crear una comunidad abierta y envolvente, es por ello por lo que animan al colectivo LGTB a acudir a través de su página de Internet. Su política de aceptación su búsqueda de la variedad les ha llevado incluso a diseñar una versión del menú en aragonés.
A Flama restaurante para veganos en Zaragoza
Cristina Sancho, cocinera del local, explica que A Flama busca crear un entorno agradable para todos aquellos que quieren formar parte del mundo del veganismo.
“Mucha gente no es vegana porque les parece un mundo complicado – afirma -. Yo creo que un espacio así ayuda a que la gente pueda acercarse”.
Desgraciadamente, el restaurante también ha sufrido las consecuencias de la COVID-19. Si bien siguen en activo a través del reparto y los pedidos a domicilio, parte de la experiencia se ha perdido. Sancho asegura que, sin los clientes, “esto es un poco frío”.
Sin embargo, el virus no les ha quitado las ganas de seguir adelante con lo que hacen y siguen cocinando con la misma pasión de siempre.
Todo apunta a que el veganismo va a continuar ganando adeptos y ellos no pueden ser menos.
