El avance sin frenos de la tecnología a nivel mundial y el desarrollo tecnológico han permeado prácticamente todos los ámbitos de la humanidad, a veces de forma positiva y otras de forma negativa. Es innegable que el desarrollo de la tecnología trae innumerables beneficios, las tecnologías deben ser valoradas como lo que son, herramientas. Herramientas cuyo fin principal es hacernos la vida un poco más fácil. Pero, por otra parte, la tecnología también trae consigo una serie de desventajas, que a veces, pueden ser desconocidas.
La tecnología mejora la productividad industrial y el aprovechamiento de recursos
Hoy en día la tecnología fomenta que el ser humano cambie su modo de vida; no podemos concebir nuestra propia realidad sin coches para ir a trabajar, o sin un teléfono móvil con el que poder hacer una llamada. La tecnología, y su consiguiente desarrollo, nos ha traído numerosos beneficios en ámbitos y sectores como la biotecnología o la infotecnología: El desarrollo de transgénicos, los robots, la inteligencia artificial, la modificación genética…
La globalización también ha sido posible gracias al desarrollo tecnológico permitiendo grandes avances en comunicación, la creación de un mercado global o el enriquecimiento y el intercambio entre culturas. Además, desde la llegada de las redes sociales a nuestras vidas la humanidad está más unificada, interconectada y es mucho más independiente.
Nunca antes habían existido luchas por un mismo fin absolutamente globales, como la lucha contra el desastre climático que se está gestando en pleno 2020. La tecnología también mejora la productividad industrial y el aprovechamiento de los recursos, acelera y automatiza procesos, da acceso a la información y facilita su análisis y procesamiento, promueve el aprendizaje gracias a la formación online…
Lo cierto es que los avances tecnológicos son parte de nuestro presente y lo van a ser de buena parte de nuestro futuro, la tecnología ha pasado a formar parte de un pilar fundamental en nuestras vidas, sin el cual, sería mucho más difícil conseguir un desarrollo social a nivel global.
El desarrollo tecnológico promueve formas de ocio más sedentarias
Las desventajas tecnológicas llegan cuando el abastecimiento de recursos primarios empieza a ponerse en peligro. El acelerado consumo de materias primas utilizadas para abastecer los sistemas tecnológicos produce un alto grado de contaminación. La explotación de los recursos también genera presiones sobre los ecosistemas y aumenta la contaminación ambiental. Pero la sostenibilidad no es solo ambiental, sino también social.
En un futuro próximo, habrá mucha menos accesibilidad al mundo laboral debido a la automatización, pues las máquinas tienen ventajas respecto a la clásica mano de obra: Inmediatez, continua actualización, conectividad… Los algoritmos podrán, incluso, controlar las decisiones personales.
La tecnología promueve formas de ocio más sedentarias y crea una menor conexión con la comunidad social a favor de la comunidad on-line. Además, el desarrollo tecnológico ha creado una brecha generacional, ya que las generaciones anteriores pueden verse con dificultades para adaptarse a las novedades.
La tecnología ha llegado para quedarse
Después de todo, el avance de las nuevas tecnologías conlleva ventajas y desventajas. El uso indebido de ellas, su mala gestión, o su desarrollo masificado, puede dar lugar a problemas ambientales, sociales, económicos… Pero debemos aceptar que la tecnología ha llegado para quedarse, y que además puede ofrecernos multiplicidad de recursos, que si sabemos gestionar, pueden sernos muy útiles en el camino hacia un sostenible desarrollo global.
Créditos ENTREMEDIOS
- Redacta: Pilar Arruebo
- Edita: Isabel Iniesta
