Autora: María Melús Sierra y Alodia Latorre Gómez
Hay quienes se niegan a vacunarse y prefieren la compraventa de certificados de vacunación falsa sin tener en cuenta los riesgos que esto conlleva.
La entrada a discotecas y a restaurantes, el acceso a partidos de fútbol o los viajes a otros países se han visto limitados por el aumento de casos de coronavirus. ¿La solución? Presentar el certificado de vacunación COVID para acreditar la situación de cada persona con respecto a la enfermedad.
España no es el primer país que se unió a esta norma; ya lo hicieron meses antes otros países como Francia o Alemania. Aun así, parece que a los establecimientos y a los propios usuarios les pilló un poco por sorpresa. ¿Cómo se valida este certificado? ¿qué ocurre si no se presenta? ¿cómo identificar certificados falsos?
El pasaporte COVID
El certificado o pasaporte COVID es un documento con un código QR emitido por un servicio público de salud y puede acreditar dos circunstancias. Para aquellos que ya han recibido dos o a lo sumo tres dosis de la vacuna, quedará reflejado que tienen la pauta de vacunación completa. Para las personas que recientemente han pasado la enfermedad, aparecerá que se encuentran en el periodo de recuperación tras la infección (entre el día 11 y 180).
En muchas circunstancias es igual de válido presentar una prueba diagnóstica negativa realizada 72 horas antes si se trata de una PCR o 48 horas antes si se trata de un test rápido de antígenos, siendo esta la única opción para aquellas personas no vacunadas.
Desde la obligatoriedad de presentar el certificado de vacunación para acceder a algunos establecimientos y viajar a ciertos lugares, han surgido dudas respecto su eficacia y al modo de control.
Varios expertos aseguran que el certificado COVID genera cierta sensación de falsa seguridad, ya que los ciudadanos vacunados pueden volver a infectarse. No obstante, pese a no ser una herramienta cien por cien segura, su uso sirve para preservar la salud y reducir los riesgos vitales que conlleva la enfermedad. Por otra parte, el exceso de información, principalmente la información falsa, ha conseguido que los usuarios no sepan distinguir entre un certificado válido y uno que no lo es.
Aplicaciones para validar el certificado
Las aplicaciones para validar el pasaporte COVID han sido otro tema debate un tanto controvertido. Algunos establecimientos de España han utilizado hasta el momento Covid Certificate Check, una aplicación de verificación de origen suizo de Google Play. Es gratuita y aunque tiene la opción de descarga en diferentes idiomas como alemán o inglés, no está disponible en castellano. Según su política de privacidad, la herramienta no recopila los datos personales y tampoco se guardan en ningún sistema. Su limitación es que no considera válidos los certificados de personas con una sola pauta de vacunación que han pasado la enfermedad, ya que no los detecta como una pauta de vacunación completa.
Los hosteleros o el ocio nocturno, entre otros, han tenido que recurrir a esta aplicación para verificar los certificados en España, puesto que no han recibido ningún tipo de indicación hasta ahora.
La Administración central ha diseñado una aplicación para verificar los códigos QR de los pasaportes europeos, de los certificados de vacunación y de los de recuperación de la enfermedad. Una herramienta que verifica su validez, no recoge datos personales y se visualiza a través de Salud Informa. Sin embargo, todavía no se le está dando uso. Por eso, los establecimientos, si no reciben ninguna indicación desde Sanidad, tendrán que ponerse de acuerdo entre ellos para utilizar esta u otra herrmienta mientras siga siendo obligatorio presentar este documento.
Un negocio lucrativo
La extensión de las medidas que imponen un certificado de vacunación para realizar ciertas actividades también ha disparado un nuevo negocio lucrativo, el de la creación de certificados de vacunación y PCR falsos. Consiste en alterar un ceryificado auténtico, sustituyendo los datos personales del titular por los de la persona que ha pedido el nuevo documento.
Hay quienes prefieren confiar en ciberdelincuentes y pagar altas cantidades de dinero para hacerse con uno de ellos, en lugar de vacunarse o esperar a tener la pauta completa. Encontrar certificados falsificados es de lo más sencillo. En redes hay cientos de usuarios que los ofrecen y su precio suele oscilar alrededor de los 200 euros. El método de pago favorito son las criptomonedas ya que una vez realizada la transacción no se puede volver atrás. El pago queda registrado para siempre y no hay forma de retirarlo.
¿Cómo se puede identificar un certificado falso? Para su detección es necesario el uso de un lector de código QR que pueda verificar su autenticidad o falsedad, como los descritos. Por eso el problema reside principalmente en las personas encargadas de reclamarlos. “Por favor, DNI y certificado COVID preparado”, piden a la entrada de los eventos deportivos celebrados en el Pabellón Príncipe Felipe. Comprobación que el nombre coincide y listo. ¿Cuántos certificados falsos se colarán por esas filas todos los días de partido?
El certificado COVID ha llegado, de momento, para quedarse. Pero todavía quedan muchas incógnitas por resolver y engaños por destapar.