Es el primer acto de celebración del décimo aniversario del grado en Periodismo de la UNIZAR
La Asociación de Periodistas de Aragón (APA) celebró la Jornada de Periodismo Low y Slow el pasado 22 de marzo como patrocinador del evento junto al Grupo de Investigación en Comunicación e Información Digital (GICID). La sala estuvo repleta de profesores del grado en Periodismo de la Universidad de Zaragoza (UNIZAR): su coordinadora, María Gómez y Patiño, Carmen Marta Lazo, José Antonio Gabelas, Víctor Lope, Miriam Sánchez, Juan Pablo Artero o Ana Mancho. No fueron los únicos: al acto, asistieron, además, alumnos comprometidos con el grado y compañeros de profesión.
En la inauguración estuvo presente el Decano de la Facultad de Filosofía y Letras, Eliseo Serrano, quien durante su intervención recalcó la importancia del periodismo para el centro y la Universidad, la dificultad que supone mantener una buena plantilla y, por consiguiente, una adecuada titulación y la importancia de reivindicarse por una enseñanza y un periodismo de calidad.
La primera reflexión sobre periodismo fue obra de la prestigiosa periodista Sagrario Sáiz, quien expuso un recorrido de la evolución de la profesión hasta la actualidad. Sáiz reflexionó también acerca de la preocupación por las conocidas fake news y de la responsabilidad de los periodistas de contrastar fuentes e información para no caer en ellas. Una conclusión mencionada durante toda la jornada en diferentes intervenciones.
El acto contó también con la primera catedrática en periodismo por la Universidad de Sevilla, Pastora Moreno; el catedrático en periodismo por la Universidad Carlos III Carlos Elías; y el profesor de la Universidad San Jorge, Jorge Miguel Rodríguez. La resolución de sus ponencias se dirigió a la necesidad del periodismo de adaptar los formatos a las nuevas generaciones, como sucede con el periodismo MOJO (Mobile Journalism). Los tres advirtieron, por otra parte, del peligro de la intoxicación que generan los entornos digitales -incluyendo, por supuesto, las redes sociales- y la información poco elaborada por parte de los medios de comunicación.
El director de El periódico de Aragón, Nicolás Espada, siguió en esta misma línea y advirtió del riesgo de perder credibilidad y fiabilidad al que se enfrenta la prensa por la necesidad imperiosa de publicar con inmediatez. En este sentido, la presentadora de los informativos de Aragón TV y profesora asociada de UNIZAR Miriam Sánchez trasladó esta misma situación a la televisión, y el presentador de los informativos en RNE Lalo Tovar al medio radiofónico. Ambos lamentaron, asimismo, la falta de recursos técnicos y de personal, lo que dificultad más, señalaron, construir una información más profunda, personalizada y veraz. En cambio, la DIRCOM Aragón Mercedes Gracia quiso dar una visión positiva de la situación del periodismo, y enfatizó en el amplio abanico de oportunidades que abre Internet.
Otro punto de interés de la jornada fue el planteamiento del director de RTVE, Pepe Quílez, sobre si los ciudadanos buscan estar informados más allá de la lectura de titulares: “Las personas quieren contenido de calidad, pero pocos la consumen, mientras que los medios buscan unos beneficios y la captación de audiencias frente a la calidad informativa, además del problema de la precariedad de medios para conseguirla “Atrapados en la crisis, nos hemos alejado de la ética”, afirmó Quílez.
De la clausura de la jornada se encargó el presidente de la APA, José Luis Trasobares, quien quiso dejar claro que para lograr un periodismo cualificado es necesaria la contribución económica del público: “Yo te doy este producto, pero págamelo bien, que es caro”, sostuvo. Para ello, según Trasobares, se debe crear una comunidad y unos contenidos de calidad, lo que implica incrementar las plantillas de los medios.
La Jornada de Periodismo Low y Slow dejó, pues, un sabor agridulce para el periodismo. Un periodismo lleno de oportunidades y con una gran variedad de medios, pero, a la vez, con muchos contenidos iguales, de baja calidad e intoxicados por las noticias falsas. Resulta determinante, con todo, concienciar a los periodistas y a la ciudadanía de la necesidad de estar bien informados, y para esto hace falta tiempo, dinero y educación.
Texto e imágenes: Dèsirée Cremades
