Jorge Sanz, un turolense de 19 años, ha podido ser estudiante de magisterio gracias a la Fundación Dádoris. Como él mismo reconoce, sin esta ayuda, “probablemente me hubiera puesto a trabajar”. Que el aprendizaje sea un derecho fundamental debería de ser algo indiscutible, pero ¿qué sucede con aquellos jóvenes con talento y falta de recursos económicos? “Pobres, pero listos”, así define Jorge a estudiantes que como él forman parte de esta Fundación.
La Fundación Dádoris nació para ayudar a adolescentes con un gran rendimiento académico y graves dificultades económicas, asegurando que puedan acceder a la universidad sin preocupaciones financieras. Esta fundación es compatible con otras becas porque Dádoris, como tal, es “un premio económico”. No solo analiza las altas capacidades de los alumnos sino otros factores como la situación familiar. “Mi testimonio es que estaba en 2º de Bachillerato, viviendo en un piso viejo y se juntaba el futuro gasto de la vida universitaria, junto con no pagar la calefacción además de otras necesidades financieras familiares”, afirma Jorge.
Como Jorge muchos estudiantes han encontrado en la Fundación un futuro. Son historias de graves necesidades económicas, familias monoparentales, refugiados etc. La Fundación que está por toda España, cuenta con una gran diversidad de estudiantes, lo que también da una riqueza intercultural inmensa.
Excelencia académica y compromiso social
Los estudiantes deben mantener un constante rendimiento académico para seguir recibiendo la ayuda. A los becarios Dádoris se les exige mantener un nivel de notas alto, similar al nivel con el que acabaron en Bachillerato, pero como cuenta Jorge, no ha tenido ningún problema hasta el momento, solo intenta mantenerse al día y no bajar su rendimiento, “si me están ayudando, tengo que merecerlo”, expresa.
Además, otro requisito que hay que cumplir es la realización de un voluntariado de 50 horas anuales. La idea es que el estudiante devuelva a la sociedad parte de lo que ha recibido, formando una cadena de solidaridad. Este compromiso va dirigido a hacer cualquier tipo de voluntariado con una proyección social, que puede abarcar desde dar clases a colectivos en exclusión hasta participar en asociaciones u ONGs. “En mi caso, participo en Cáritas y pienso que es bonito porque la fundación nos ayuda para que después podamos ayudar a más personas”, expresa Jorge.
Un acompañamiento para la vida
Dádoris destaca por ser “tremendamente humana” ya que no solo ayuda económicamente, sino que acompaña a los beneficiarios durante toda su formación con accesos a redes de contactos, experiencias, viajes internacionales o ayudas para cursos, como idiomas o formación en liderazgo.
Pero, sobre todo, su fortaleza está en el papel de los tutores, quienes apoyan a cada becario de manera personalizada. Carmen Galán, tutora de Jorge, ha sido una de las personas más importantes que ha conocido, “ha hecho muchas cosas por mí, ha estado en momentos difíciles para mi familia intentando ayudar siempre”, confiesa.
Carmen llegó a la fundación porque era consciente de todos los jóvenes talentosos que no podían estudiar y no tenían la suerte para llevarlo a cabo. Su labor como la de los demás tutores, totalmente altruista, es adaptarse a las necesidades de cada becado. En el caso de Jorge se dio cuenta de que su mundo estaba limitado a Teruel y su reto era que viviera experiencias personales y culturales más allá. Con todo ello Jorge ha experimentado un gran crecimiento personal y una visión del mundo más amplía. “Es un chico muy especial”, confiesa Carmen con orgullo.
Estudiantes de la Fundación Dádoris en la Representación de la Comisión Europea en España. Fuente: Instagram Fundación Dádoris
La Fundación Dádoris se mantiene con la ayuda de empresas, entidades colaboradoras, o personas que deciden donar dinero para invertir en el futuro de estos jóvenes. Una vez graduados forman parte de Dádoris Alumni, ya sea con asesoramiento, voluntariado o alguna ayuda económica, y asesorar a los próximos estudiantes como una vez hicieron con ellos.
La misión de la Fundación es clara: cambiar el presente de los estudiantes no solo para su propio futuro, sino para el futuro de una sociedad más justa e inclusiva que necesita de estos talentos.
Si quieres saber más o solicitar esta ayuda, puedes informarte a través de: https://fundaciondadoris.org/noticias/
Autora: Nazaret Parrilla