Texto y fotografías: Nerea Monte.
Es un hecho que la evolución de la tecnología tiene como consecuencia directa un cambio en la sociedad. Digamos que, más bien, tiene el objetivo de transformarla, continuamente. Nosotros esperamos esos cambios y nos adaptamos a ellos, una vez tras otra. Pero ¿y si pudiéramos dar un paso más e imprimir nuestras propias necesidades? Esta realidad ya ha llegado a Zaragoza de la mano de CaixaForum con la exposición «Print3D. Reimprimir la realidad».
“Con la impresión 3D, se libera la complejidad. A la impresora le da igual hacer la forma más rudimentaria o la más compleja”, afirmaba el exCEO de 3D Systems y experto en fabricación aditiva Avi Reichental. Para mostrar al mundo sus aplicaciones, la exposición, que permanecerá en la ciudad hasta el 10 de abril, recoge más de 200 piezas impresas con apoyos audiovisuales e interactivos con los que la experiencia cobra un tono dinámico y didáctico.
Al entrar en la sala, encontramos paneles explicativos sobre qué es la impresión 3D y cómo funciona. Siguiendo el recorrido, pasamos a otra de las ocho temáticas recogidas en la exposición: su aplicación sanitaria. Encontramos prótesis de miembros del cuerpo animal y humano y fotografías de pacientes que, gracias a esta tecnología, pueden volver a caminar; maquetas previas a intervenciones quirúrgicas para analizar minuciosamente la situación antes de una operación; o, incluso, una réplica de un órgano funcional.
Sin embargo, la aplicación de la impresión 3D va más allá: moda, arte y construcción son otras temáticas que se abordan. Encontramos ejemplares de zapatillas y vestidos que bien podrían estar en cualquier escaparate o pasarela. A esta tecnología, se le suman los apoyos interactivos desde los que, en esta sección, puedes probarte –digitalmente, por supuesto– los ítems de la exposición.
Cuando hablamos de arte, no se trata solo de estatuas y figuras, que las hay, sino a la fabricación de instrumentos musicales a través de este tipo de impresión: desde guitarras eléctricas hasta violines.
La última parte del recorrido, tras poder imprimir tu propia cara en uno de los paneles, nos lleva a la construcción. Las posibilidades de emplear materiales de distintas características como termoplásticos, metal, fibra de carbono o grafito la convierten a la impresión en un método útil a la hora de abordar todo tipo de industrias, incluyendo la automotriz y aeroespacial. La exposición recoge maquetas, planos y pequeños ejemplares de construcciones impresas en 3 dimensiones.
La sala, llena de personas de todas las edades, no dejaba de sorprender a los asistentes. Por eso, desde Entremedios te invitamos a conocer más el nuevo método revolucionario de fabricación de una forma divertida y amena. La entrada es gratuita para aquellos con carné joven, clientes CaixaBank o menores de 16 años. Si no, la entrada asciende a los 6€.
La exposición argumenta un hecho: la impresión 3D ha venido para quedarse y su aplicación podría cambiar nuestro método productivo actual. ¿A qué estás esperando para conocer este futuro impreso en 3 dimensiones?