– Crónica e imágenes de Irina Bellido –
El rapero Lil Nas X se subía por primera vez a un escenario de España con su primera gira, «Long Live Montero». Con todas las entradas vendidas, el artista estadounidense ha ofrecido su último espectáculo a un público que se ha volcado de lleno desde el primer minuto hasta el último.
El cantante, que cuenta con más de 39 millones de oyentes en Spotify, es uno de los artistas más sonados del momento, además de por su música, por ser un gran defensor de los derechos tanto de la comunidad LGTBI como de la afroamericana. Durante este concierto, que ha durado una hora y cuarto, el cantante ha interpretado algunas de sus canciones más icónicas, como Montero (Call me by your name), que cuenta con más de un billón de reproducciones, u Old Town Road, ganadora de dos premios Grammy. Aunque únicamente tiene un disco en el mercado musical, ha conseguido que sus canciones, que mezclan tanto country como hip-hop, sean conocidas en prácticamente todo el mundo.
Dividido en tres actos, el cantante junto con sus ocho bailarines ha ofrecido un espectáculo en el que la colorida escenografía y el baile han sido los protagonistas. El Sant Jordi Club ha bailado más que nunca mientras el artista interpretaba That ‘s What I want y se ha llenado de confetis rosas en forma de mariposas mientras sonaba Industry Baby, un tema que publicó junto al rapero Jack Harlow.
Pero, sin ninguna duda, el momento de la noche ha tenido lugar cuando siete personas del público han tenido la suerte de poder subirse al escenario e improvisar diferentes pasos de baile junto al cantante y su cuerpo de baile. Como ya había sonado en otros conciertos, el rapero ha afirmado que en breves comenzará a escribir su segundo álbum, pero que aún habrá que esperar hasta que vea la luz.
Como desenlace de su primera gira mundial, Lil Nas x ha interpretado su último lanzamiento, Star Walkin, himno este año del mundial de League of Legends. Una canción que, a pesar de ver la luz hace poco, todo el público se ha sabido de principio a fin y que fue el broche perfecto a su primera gira mundial.